El Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) informó que el beneficio de Manos a la Obra se reestructurará a partir de este año 2015. Este programa brindará atención integral para que se desarrollen las capacidades de las personas beneficiarias y les brinde herramientas para salir de la pobreza.
El beneficio de Manos a la Obra, creado en la administración anterior, tenía el fin de brindar ayuda económica a personas en condición de pobreza y desempleadas entre los 15 y 64 años, a cambio de su participación en los diferentes trabajos comunales, esto como una opción mientras encontraban un nuevo trabajo.
Este programa brindó beneficios comunales con aportes para municipalidades y asociaciones de desarrollo, y tuvo casos de éxito que se desarrollaron en pymes. Asimismo sirvió para el desarrollo de los Centros Comunitarios Inteligentes (CECIS) del Ministerio de Ciencia y Tecnología (MICIT) y aportó en comunidades indígenas. Sin embargo tal y como estaba formulado generaba una modalidad de subempleo, que a su vez derivaba en dependencia asistencial, es decir, no era asumido como un beneficio temporal sino como una asistencia permanente.
“Si bien tuvo algunos aciertos, el programa da una respuesta incompleta al combate de la pobreza, se queda en un nivel asistencial y no genera la promoción y desarrollo de las familias. Por ello estamos optando por seguir el trabajo con las familias en la modalidad de atención integral” afirmó Carlos Alvarado Quesada, Presidente Ejecutivo del IMAS y Ministro de Desarrollo Humano e Inclusión Social.
A partir de la reestructuración, el componente comunal podría permanecer según cada caso específico, pero el eje del programa será la capacitación de la familia y la generación de oportunidades. Las alianzas con los CECIs, territorios indígenas, municipalidades y asociaciones de desarrollo podrán continuar, siempre y cuando el eje central sea la generación de capacidades de las personas que se encuentran en condiciones de pobreza.
“Además, tomo esta decisión de reestructurarlo por las numerosas denuncias de clientelismo político sobre el programa alrededor del país, asociadas con la selección de los beneficiarios, las cuales si bien han sido difíciles de documentar, son más que reiteradas. Las familias que están en el programa no se verán perjudicadas, pues seguirán bajo la modalidad de atención integral, pero con el cambio se elimina la discrecionalidad en la selección” expresó Alvarado Quesada.
La estrategia de atención integral se constituye en un modelo que permite el acceso preferente a la oferta de servicios del Estado, con la finalidad de atender en conjunto la multicausalidad de la pobreza y minimizar en las familias la posibilidad de dependencia a programas sociales de transferencias monetarias y o subsidios económicos, generando las oportunidades necesarias para una independencia económica sostenible.