Punta Islita, una comunidad comprometida con la protección de la naturaleza y la atracción del turista nacional y extranjero ofreciendo un producto diferenciado, experimenta hoy la satisfacción de contar una vez más y por octavo año consecutivo, con una Bandera Azul Ecológica, categoría una estrella; otorgada a su playa del mismo nombre.
El desarrollo de Punta Islita situado en el cantón Nandayure no habría sido posible, sin la estrecha relación que mantienen sus pobladores con el Hotel Punta Islita, cuya filosofía se basa en aprovechar los recursos que ofrece su entorno, para que el turista experimente la sensación de estar en un pueblo turístico que une a sus atractivos la inclinación por el arte en sus diversas manifestaciones.
El mismo interés con que los habitantes de esta comunidad demuestran en sus relaciones con el Hotel Punta Islita, se manifiesta en el trabajo que realizan como parte del Comité de Bandera Azul Ecológica, que este año trabajó arduamente por alcanzar el preciado galardón.
Durante la reciente entrega de galardones Bandera Azul Ecológica, el Sr. Alonso Bermúdez, Gerente de Servicios de Mantenimiento de Hotel Punta Islita indicó que, Playa Punta Islita ha obtenido la Bandera Azul Ecológica desde hace ocho años como resultado de un trabajo conjunto entre el hotel y la comunidad.
Indicó que “En esta relación el hotel brinda las facilidades para que el programa se lleve a cabo, iniciativa que parte del Programa de Responsabilidad Social del Hotel Punta Islita, que les ha permitido crecer a la par de una comunidad muy agradable, lo que facilita la labor”.
Uno de los factores que deben cumplirse para optar por un galardón Bandera Azul Ecológica es la recolección de desechos y en este sentido el Hotel Punta Islita ha dado las herramientas necesarias para que la comunidad participe en esta labor y juegue un papel activo.
Las banderas obtenidas por playa Punta Islita han sido de una o dos estrellas y ello obedece a que a pesar de los esfuerzos que hace la empresa y la comunidad, no ha sido posible interesar a algunas organizaciones sociales a que se unan al Comité y les permita aspirar a obtener banderas azules de tres o cuatro estrellas.
Este año, se logró que la Cruz Roja participara activamente por lo que es posible que el próximo año se obtengan dos estrellas.
El programa de responsabilidad social del Hotel Punta Islita, además de involucrar a la comunidad está orientado hacia el tema del medio ambiente, procurando lograr un concepto de sostenibilidad que toma en cuenta tanto al personal como a los visitantes.
Un ejemplo de esto, es el programa de recolección de desechos en la playa, que se lleva a cabo los jueves, donde además de las labores de limpieza se ofrece un refrigerio a los participantes y se les entregan premios.
Bermúdez explicó que “Es fácil interesar a los niños en este tipo de labores porque saben que al final de una jornada de recolección de desechos pueden obtener un premio, como participar en un canopy o bien realizar un paseo a caballo, al mismo tiempo que se les inculca la responsabilidad de mantener la playa en optimas condiciones de limpieza”.
En el caso de los adultos el Hotel Punta Islita creó un centro de acopio de los desechos al que llegan un grupo de clasificadores de vidrio, aluminio o plástico.
Futuro
Además de las charlas y talleres orientados a crear conciencia en los vecinos sobre la necesidad de mantener una relación de vida en armonía con la naturaleza, que Hotel Punta Islita ofrece como parte del programa de responsabilidad social; se trabaja en un proyecto de reinserción de lapas en su entorno natural que a la fecha ha permitido que una docena de lapas vivan en libertad.
Los planes apuntan también a crear una Asociación de Desarrollo Integral que involucre a Islita y otras comunidades vecinas, lo que sin duda también contribuirá a que se obtenga el próximo año una nueva bandera con más estrellas.
Debido a que el aspecto cultural ha sido uno de los elementos que más ha diferenciado al Hotel Punta Islita a lo largo de su historia, la administración lo fortalecerá para avanzar en la obtención de un nuevo galardón.