Informes de la auditoría del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) concluyeron que el tramo de carretera 27 de Abril-Villarreal en Santa Cruz, que recién pasó de lastre a asfalto, presentó errores de construcción que le podrían costar una reducción de su vida útil.
Se trata de 13,5 kilómetros intervenidos mediante una inversión de ?4.800 millones, que incluyó además del asfaltado, la construcción de aceras peatonales, una carpeta de ruedo de 9 centímetros de grosor, más una base estabilizada con cemento de 20 centímetros de grosor también. Además se construyen cuatro puentes y una alcantarilla.
El último informe emitido por el Lanamme fue enviado al Conavi en enero de este año, se basa en un estudio de auditoría del 2014, en el que se determina que la fórmula de resistencia de la base estabilizada del cemento podría agrietarse. La resistencia de la comprensión de la base estabilizada duplica el promedio establecido, lo que repercute en la durabilidad del material, según Lanamme.
“Cabe recalcar que no es recomendable dar a la capa de base estabilizada un exceso de resistencia debido a que con una rigidez excesiva se vuelve susceptible al agrietamiento, con la consecuencia de que las grietas que se forman se reflejarán en las capas que se colocarán sobre la base”, señala el informe.
Durante las visitas de los auditores del Lanamme, se evidenció un deterioro de la carretera que pudo obedecer a un largo periodo de espera entre la colocación del cemento y el asfalto, mientras la carretera se mantuvo abierta, de acuerdo con el informe.
“Estos deterioros pueden obedecer a un periodo extenso desde el momento en que se finalizó la estabilización de la base de cemento y su protección con el sello de imprimación hasta la colocación de la capa asfáltica, periodo en cual la vía se mantuvo abierta parcialmente al tránsito vehicular”, sostienen los técnicos de Lanamme.
La auditoría del Conavi realizó un informe el año pasado en el que se sostienen los señalamientos del Lanamme.
Entre otras advertencias, también se señala que en algunos puntos se colocó doble capa de asfalto para disminuir irregularidades en la base de cemento, lo que no es una buena práctica constructiva, según la auditoría.
En al menos dos advertencias más, la auditoría del Conavi le reitera a la institución que los defectos comprometen la vida útil de la carretera y recomendó corregir las anomalías.