A cinco meses de ocurrido el terremoto de Nicoya las secuelas siguen afectando a la población guanacasteca, en particular a cientos de escolares de las zonas afectadas por el sismo, que no podrán iniciar sus lecciones correspondientes al ciclo lectivo del 2013 por el marcado deterioro de la infraestructura.
El Departamento de Infraestructura y equipamiento del Ministerio de Educación Pública informó que cerca de 90 escuelas situadas en Nicoya, Hojancha, Nandayure y los distritos peninsulares, presentan graves daños sin que a la fecha hayan sido reparados.
Otro factor que atenta contra la continuidad de los estudios para cientos de escolares es que algunos centros educativos deben ser demolidos.
El MEP en su evaluación determinó que otros 250 centros educativos situados en Puntarenas, Grecia y Valverde Vega, de la provincia de Alajuela; además de los de Guanacaste tienen daños que están en proceso de reparación con recursos del ministerio y de las juntas de educación.
Para llevar a cabo las reparaciones posibles la Dirección de Infraestructura del MEP giró ¢1.500 millones de colones en octubre y ¢ 4.500 millones de colones en diciembre.
En las 90 escuelas seriamente dañadas, de las cuales 20 requieren ser demolidas y reconstruidas, la Dirección Regional del Ministerio de Educación de Nicoya que coordina las labores en ese cantón como en Nandayure y Hojancha, trabaja contra el tiempo habilitando aulas provisionales en salones comunales y otras instalaciones, método que se aplicó luego del cinco de setiembre del año anterior hasta la finalización del curso lectivo.